En una decisión que afecta directamente a quienes transitan a diario por las estaciones de Metro, la empresa anunció la implementación de una nueva política de control sobre el transporte de carga al interior de sus trenes y estaciones. Desde ahora, se encuentra prohibido el ingreso de carros de carga tipo yegua y del tipo supermercado. La medida, aunque definitiva, será monitoreada y evaluada periódicamente para revisar sus resultados y eventuales ajustes.
Según detalló Metro, la decisión nace de la necesidad de frenar el uso de estos elementos por parte del comercio ilegal. En la actualidad, este tipo de carros es utilizado frecuentemente para trasladar productos de procedencia incierta, que terminan siendo vendidos en los espacios del transporte subterráneo, afectando el orden, el flujo de personas y provocando daños materiales a estructuras como escaleras mecánicas y ascensores.
No se trata de una restricción total al transporte de carga. Maletas, mochilas, bolsos de viaje e incluso los clásicos carritos personales que muchas vecinas y vecinos usan para ir a la feria siguen siendo permitidos. El foco está puesto en los elementos de gran tamaño y uso comercial, que interfieren con la comodidad y seguridad del resto de los pasajeros.
La norma se aplicará sin excepciones a lo largo de toda la red de Metro de Santiago y será fiscalizada por personal de seguridad y a través de cámaras de vigilancia instaladas en estaciones. Quienes intenten ingresar con estos carros, incluso si están desarmados, no podrán continuar su trayecto con ellos, y se les solicitará retirarlos del lugar. En caso de negativa, se activarán los protocolos internos de Metro e incluso se podrá recurrir al apoyo de Carabineros.
Desde Metro señalaron que esta es una medida pensada principalmente en el beneficio colectivo: trayectos más cómodos, estaciones más limpias y seguras, y una red menos expuesta a daños o bloqueos. Se espera que con esta acción también se desincentive el uso del sistema para actividades informales que afectan la experiencia de viaje de miles de personas.
La información ha sido difundida ampliamente a través de medios de comunicación, gráficas informativas, pantallas digitales y redes sociales de Metro, además de anuncios sonoros en trenes y estaciones.
Esta medida busca fortalecer la seguridad del transporte público y devolver a las y los pasajeros una experiencia de viaje más ordenada. En comunas como Maipú, donde muchas personas utilizan diariamente el Metro para ir al trabajo o estudiar, se espera que esta acción tenga efectos positivos visibles en la convivencia diaria. Además, plantea un debate más amplio sobre el uso de los espacios públicos y el impacto de las actividades informales en la infraestructura urbana.
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